La soledad

 Salmo 22: 1
Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?
¿Por qué estás tan lejos de mi salvación y de las palabras de mi clamor?
Cuántas veces hemos experimentado lo que  experimentó David  en este salmo?
 David expresaba que se sentía solo como si Dios se hubiese olvidado de el.
Jesús experimentó lo mismo y dijo estas palabras Dios mío, Dios mío porque me has abandonado. Elías se desanimó después de una asombrosa victoria Contra los falsos profetas de baal. En fin la lista es extensa. Muchos  de los grandes hombres de la biblia experimentaron la soledad, la duda, el miedo, y  asta llegaron a pensar que Dios se había olvidado de ellos y que los había abandonado. La realidad es que todos experimentamos la soledad nadie escapa esta realidad yo personalmente no creo en aquellos cristianos que siempre andan con el aleluya, gloria Dios en la boca y actúan como si siempre todo fuera de color de rosa. Usted  le pregunta cómo están y siempre dicen bendecido y en Victoria,es tiempo de ser real no todo el tiempo estamos en victoria aunque posicionalmente estamos en Victoria junto con Cristo Jesús  sentado a la diestra del padre en el mundo natural experimentamos desilusiones, derrotas, y muchas veces nos sentimos sólo al punto que hasta pensamos que Dios se olvidado de nosotros.  Yo no creo que tiene nada de malo ser el honesto y decir  estoy pasando por pruebas estoy pasando por situaciones difíciles cuando alguien nos pregunta y  si les tenemos confianza a esa persona decirle lo que no pasa pues la verdad que es duro cargar con las pruebas, y la soledad solo. Ayuda bastante desahogarse y pedirle a alguien que ore por nosotros cuando nos sentimos sin fuerza para hacerlo. Sólo que debemos de saber con quién lo hacemos pues no a todo el mundo se le puede contar lo que nos pasa. Decir hermano, o hermana ore por mí estoy pasando por momentos difíciles no les resta a su fe  y a su carácter como cristiano en vez de decir estoy en victoria cuando cuando no es verdad. 
Muchas Iglesias nos enseñan a ser hipócrita y andar con una sonrisa y decir que estamos en Victoria cuando nos sentimos que estamos te desfalleciendo.
 La fe no niega la circunstancias sino cree que Dios puede obrar por medio de ellas.
No demos una falsa impresión al mundo pues le hacemos creer que el cristiano debe de tener una vida perfecta y que nos sufrimos y no pasamos por tribulaciones. Seamos real pues al serlo otros se identificaran con nosotros y creerán que si Dios nos da la fuerza para vencer también sé la dará a ellos.
 No es que usted y yo andemos llorando por los rincones y diciéndole a todo el mundo lo que no pasa no creo que esa es la  imagen de derrota que debemos presentar ante un mundo que por si se está cayendo en pedazo pero si podemos decir estoy pasando por  pruebas  pero mi Dios tiene el control.  podemos llamar a un hermano en la fe y decirle cómo nos sentimos, es un error encerrarse y tratar de luchar sólo con lo que nos está atormentando por eso somos un cuerpo para sostenerlo el uno al otro cuando nos falten las fuerzas. Dejemos de querer aparentar que somos los super cristianos y seamos reales.
 Habrán momentos en nuestro caminar con el señor que vamos a experimentar el dolor,  soledad, y el fracaso momento en que todos se nos viene encima y por más que oramos pareciera que Dios se olvidado de nosotros. Experimentaremos momentos de soledad  donde  parece  que no tenemos a nadie y que nadie le importamos. Esto no debe de asombrarnos si los grandes hombres de la biblia lo experimentaron nosotros también ya que  ser hijo de Dios no, nos excluye de experimentar el dolor la soledad, y la injusticia que hay en el mundo lo cual viene por el resultado del pecado.

El señor no,nos ha prometido que no experimentaremos está tribulaciones si nos prometió estar con nosotros y darnos paz aún en medio de la tormenta. Tenemos que ser real  el cristiano tiene temporadas  en que se siente solo, momentos en que se decepciona  en lo que se frustra pero la fe en nuestro Dios es el ancla que nos sostiene Y nos da la fuerza para seguir luchando aún cuando ya no tenemos fuerzas.  Es esa fe la que no hace creer que más allá del túnel habrá una luz que después de la lluvia saldrá el sol y que después de la tormenta vendrá la calma.

Yo recientemente fui  golpeada  con todos esto detonantes espirituales y me sentí horrible y me pareció que estabas sola pero clamé, llore y a veces bueno llorar desahogarse y cuando digo que clamé no me refiero solamente clamarle a  Dios me refiero a hablar con una persona  a la que le tengo confianza y decirle cómo me sentía en  ese momento ya  que no me sentía con ánimo  ni siquiera  orar pero esta persona me animo me dio palabra de aliento y me recordó de todo lo que Dios había hecho por mi. Se necesitan más oído en el cuerpo de Cristo aquellos que te den una mano cuando sientes que no puede más, aquellos que levanten tus brazos cuando ya tú no tiene fuerzas para hacerlo.

 Luego de esa experiencia le pedí perdón al señor por mi  ingratitud  por no pensar en todo lo bueno que me ha dado y  solo enfocarme en todo lo malo que me estaba sucediendo en mi vida en ese momento. Mis amados hermano la tempestad llegará los vientos serán recios pero nunca podrá ser tan fuerte que puedan derrumbar el arca donde nos refugiamos. Es en los momentos en los que creemos que Dios nos ha abandonado es cuando más cerca de nosotros esta. Esa soledad,  frustración, y esa tribulación están diseñadas para enseñarnos a ser fuertes en el señor y para que aprendamos a caminar por fe aun cuando las circunstancias digan todo lo contrario. Son esos momento los que no llevan hacer más dependiente de Dios y meno auto-suficiente.

Es normal pasar por estos episodio de soledad, y silencio con Dios?
Si y esto no quiere decir que Dios no se preocupa por nosotros o que nos haya abandonado sino que está trabajando en silencio. Estos momentos de silencio solo nos ensenan a esperar, y a confiar en Él. Prueban, y fortalecen en nosotros el aria de la confianza,  fe, y la esperanza en Dios. Como David dijo nunca he visto el justo desamparado seamos paciente esperemos en el señor no, nos desesperamos no permitamos que satanás nos inyecte pensamientos de desesperación, desanimo y depresión. Su palabra dice en el libro de Isaías 49:15
¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti.
También no dice que el nunca nos dejara.El silencio de Dios debe llenarnos a confiar en él.
Si no tuviese estas pruebas como supiera que Dios puede resolverlas.  Si estás pasando por  estos momentos y siente que no puede más hoy te digo que si puedes refúgiate en el señor busca una Hermana, un hermano a quien le tenga confianza y pídeles que interceda por ti que te ayude con el peso de tu carga sé fuerte, y valiente esfuérzate  esto pasara y verás que el te dará la victoria pues el a prometido nunca dejarte y nunca abandonarte.
Pastora Judy Jaramillo